El gobierno de Estados Unidos recogió a casi 19 mil niños migrantes que viajaban solos a través de la frontera con México en marzo, dijeron las autoridades este jueves, se trata de la cifra mensual más grande jamás registrada y una prueba importante para el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, mientras revierte muchas de las tácticas de migración de su predecesor, Donald Trump.
Una compleja combinación de factores en Estados Unidos y Centroamérica impulsó el aumento. La movilización coincide con la decisión de la administración de Joe Biden de eximir a los niños de la regla que ordenaba la expulsión inmediatamente a la mayoría de las personas sin darles la oportunidad de buscar asilo.
Las autoridades recogieron en total a 18 mil 890 niños no acompañados en marzo, según la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos, muy por encima de los máximos anteriores de 11 mil 475 en mayo de 2019 y 10 mil 620 en junio de 2014 reportados por la Patrulla Fronteriza.
El enorme aumento de niños que viajan solos, algunos de ellos menores de 4 años, ha afectado gravemente a las instalaciones de detención fronteriza, que no pueden retener a personas durante más de tres días, pero a menudo lo hacen.
Para muchos, un huracán que azotó Centroamérica en noviembre de 2020 incrementó la pobreza y la violencia que han llevado a la gente a huir durante décadas. Los cambios en la política estadounidense bajo la administración Biden también han guiado sus decisiones.
La CBP debe transferir a los niños no acompañados después de 72 horas al Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos, cuyas instalaciones son más adecuadas para el cuidado a largo plazo mientras se hacen los arreglos para liberarlos. Más de 2 mil niños fueron retenidos más tiempo en las instalaciones de Donna un día la semana pasada, con 39 allí al menos 15 días.
Las autoridades norteamericanas abrieron su primera instalación de retención temporal en Carrizo Springs, Texas, el 22 de febrero, y desde entonces ha llegado a una serie de acuerdos para ocupar grandes lugares cerca de la frontera, incluidos los centros de convenciones en Dallas y San Diego, un estadio en San Antonio, Texas y la base militar de Fort Bliss en El Paso, Texas.
El departamento también ha estado pagando vuelos para niños y patrocinadores para limitar el tiempo bajo custodia del gobierno.
