Casi 6 mil vuelos se cancelaron en todo el mundo en Navidad y otros miles se retrasaron debido a la variante ómicron del coronavirus, según el sitio web de seguimiento Flightaware, sumando frustración a la pandemia.
Según Flightaware.com, a las 19:30 GMT se habían cancelado más de 2 mil 600 vuelos en todo el mundo el día de Navidad, incluidos unos 929 con origen o destino en aeropuertos de Estados Unidos, que se suman a los suprimidos a los 2 mil 231 del jueves y los cerca de 2 mil 400 del viernes, día en el que también se registraron 11 mil retrasos.
Según el mismo sitio web, para el domingo ya ha se ha confirmado la cancelación de 900 vuelos.
Numerosas empresas consultadas por la AFP mencionaron como causa de las anulaciones la nueva ola de la pandemia, que afecta especialmente a las tripulaciones.
Pilotos, asistentes de vuelo y otro personal se reportaron enfermos o debieron entrar en cuarentena, obligando a muchas aerolíneas a cancelar vuelos durante uno de los períodos pico de viaje del año.
La mayoría de los vuelos habían sido programados antes de la aparición de ómicron, más contagiosa que las variantes anteriores.
United Airlines, por ejemplo, canceló 439 vuelos el viernes y sábado, el 10% de los programados, según Flightware.
“El pico de casos de ómicron en todo el país esta semana ha tenido un impacto directo en nuestras tripulaciones y las personas que dirigen nuestras operaciones”, señaló la compañía, que dijo estar buscando soluciones a los pasajeros afectados.
Delta también canceló 300 vuelos el sábado y unos 170 el viernes, tanto por ómicron como por condiciones climáticas adversas, aunque en menor grado.
Se anularon igualmente más de once vuelos de Alaska Airlines, algunos de cuyos empleados señalaron haber estado “potencialmente expuestos al virus” y debieron aislarse.
Las aerolíneas chinas representaron el mayor número de cancelaciones: China Eastern había anulado unos mil y Air China, 264, en ambos casos más de la quinta parte de sus salidas programadas.
“Frío anómalo”
Las cancelaciones agregaron frustración a la pandemia, pues mucha gente no pudo reunirse con sus familias para las fiestas, luego del duro golpe que propinó el coronavirus a la Navidad de 2020.
Según estimaciones de la Asociación Estadounidense del Automóvil (AAA), se esperaba que más de 109 millones de estadounidenses abandonaran su área en avión, tren o automóvil entre el 23 de diciembre y el 2 de enero, un aumento del 34% con respecto al año pasado.
Pero la mayoría de esos planes de vacaciones y reuniones familiares se hicieron antes de la aparición de la variante ómicron, que se ha convertido en la dominante en Estados Unidos, abrumando a algunos hospitales y trabajadores de la salud.
El estado de Nueva York anunció el viernes que había registrado su récord de nuevos casos de coronavirus en 24 horas con 44 mil 431, en medio de un repunte de los contagios en todo Estados Unidos.
En cuanto al tiempo, mientras en los estados del este se registran temperaturas inusualmente cálidas, el Servicio Meteorológico Nacional (NWS, por sus siglas en inglés) advertía de un frente frío con bajas temperaturas que afectará al oeste.
“Las condiciones anómalas de frío y un aluvión de humedad del Pacífico dan lugar a periodos prolongados de nieve en las montañas y lluvias en la costa y los valles, algunas de las cuales pueden caer con fuerza”, dijo el NWS en un aviso.
Se prevé que este fin de semana caigan entre 61 y 122 centímetros de nieve en las montañas de la Sierra Norte y Central de California y Oregón.
Los viajes serán “traicioneros y a veces imposibles” desde las Sierras hasta las Montañas Rocosas centrales durante el fin de semana debido a las condiciones de nieve, añadió el NWS.
EC