El hijo del capo alcanzó un acuerdo con las autoridades para reducir su condena tras declarase culpable en 2021
Ismael Zambada Imperial alias “Mayito Gordo”, hijo de Ismael “El Mayo” Zambada, líder del Cártel de Sinaloa, fue sentenciado a nueve años de prisión este viernes por un juez de la Corte Federal del distrito sur de California, Estados Unidos.
En una audiencia celebrada durante la mañana de este 24 de junio, el juez Danna Sabraw dictó dicha sentencia por dos cargos de narcotráfico en contra del también conocido como ‘narcojunior’, quien fue detenido el 13 de noviembre de 2014 en Sinaloa, y extraditado a Estados Unidos hasta diciembre de 2019.
Cabe recordar que en abril de 2021, ‘El Mayito Gordo’ se declaró culpable de importar y distribuir metanfetamina, cocaína y mariguana a Estados Unidos, por lo que alcanzó un acuerdo con autoridades de ese país para reducir su condena.
Al respecto, el juez señaló que la sentencia contra el hijo del capo sinaloense es “suficiente, pero no mayor de lo necesario” y se le contará el tiempo que ha estado preso, desde su detención en 2014.
Ismael Zambada continuará su reclusión en el Centro de Detención Metropolitano de San Diego, sin embargo, no se aclaró si sería trasladado a otra prisión para cumplir el resto del tiempo acordado.
De acuerdo con autoridades de México y Estados Unidos, el tercer hijo de ‘El Mayo’ conspiró para transportar la droga, además de lavar y transferir las ganancias del narcotráfico hacia México, “en beneficio de los miembros del Cártel de Sinaloa y de sus asociados”.
Ismael “El Mayo” Zambada
El capo sinaloense inició su trayectoria en el narcotráfico en la década de los setenta, en el Cártel de Guadalajara, y posteriormente, en el ” de Amado Carrillo, alias “El Señor de los Cielos”, en el cual ascendió hasta asumir su liderazgo tras la muerte de Carrillo.
Cuando Joaquín “Chapo” Guzmán fue detenido en febrero de 2014, su gran aliado Ismael “El Mayo” Zambada, y uno de sus mentores, tomó su lugar al mando del Cártel de Sinaloa. Ese mismo día, la DEA convirtió al “Mayo” en el capo más poderoso del Norte de México.
Cabe mencionar que “El Mayo” es el único capo que nunca ha sido capturado por las autoridades, pues existe la versión extraoficial de que recurrió a una cirugía plástica para cambiarse el rostro, evitando así su identificación.