Entre los países que se ha detectado la contaminación del jarabe están Indonesia, Gambia y Uzbekistán, donde han fallecido 300 personas
En los últimos cuatro meses, al menos siete países han reportado casos de jarabe para la tos contaminado o que podría presentar contaminación, entre ellos tres (Indonesia, Gambia y Uzbekistán) donde han fallecido 300 personas, en su mayoría niños, advirtió la Organización Mundial de la Salud (OMS).
A los casos de fallecidos en esos tres países, que ya se conocían y habían motivado alertas de la OMS para que determinados jarabes dejaran de usarse, el organismo suma ahora Filipinas, Timor Oriental, Senegal y Camboya, donde la presencia de jarabes contaminados no ha sido aún confirmada pero hay riesgos potenciales de ello.
Asimismo, los productos contaminados lograron autorización para ser introducidos en otros mercados, aunque “no se espera que estén a la venta”, indicó en respuesta a una pregunta de EFE la portavoz de la OMS Margaret Harris.
Ante la proliferación de casos, la OMS ha hecho un llamamiento a la comunidad internacional para que aumenten los esfuerzos de detección y retirada de este tipo de productos contaminados.
Los jarabes contaminados presentaban altos niveles de dietilenglicol y etilenglicol, productos químicos tóxicos que se utilizan habitualmente como disolventes industriales y agentes anticongelantes que pueden resultar letales incluso ingeridos en pequeñas cantidades, imposibilitando su uso farmacéutico.
Emiten tres alertas por jarabes contaminados
La OMS emitió tres alertas sobre jarabes contaminados de este tipo: primero en octubre al hallarse en Gambia (donde se cree que han causado al menos 70 muertos), al mes siguiente otra para Indonesia (con unos 200 fallecidos) y este mes de enero en Uzbekistán, donde se han contabilizado al menos 21 decesos.
La mayoría de las víctimas son niños menores de cinco años, alertó la organización con sede en Ginebra.
Las alertas, también enviadas al resto de los 194 países miembros de la OMS, recomiendan la retirada de estos jarabes contaminados si se encuentran en otros mercados, un aumento de las medidas de inspección, e inmediata notificación a la agencia internacional si se encuentran nuevos casos.
La alerta para Gambia afectaba a jarabes producidos por el laboratorio indio Maiden Pharmaceuticals, la de Uzbekistán para productos similares de la también india Marion Biotech, y la de Indonesia se refería a productos de manufactura local, la mayoría por parte de la firma PT Afi Farma.