Ciudad de México.- Un policía de Guerrero detenido este año, por supuestos vínculos con los narcotraficantes que desaparecieron a los 43 normalistas de Ayotzinapa. es tío de uno de esos estudiantes.
Fidencio Hernández Cortés, agente de la Secretaría de Seguridad Pública del estado, es tío de Adán Abraján de la Cruz, uno de los alumnos de la Escuela Normal Rural Isidro Burgos de Ayotzinapa, desaparecido hace 10 años en Iguala.
Allegados a la indagatoria dijeron que el agente, hoy preso en el Penal del Altiplano y procesado por el delito de delincuencia organizada, es primo de Bernabé Abraján Gaspar, padre del joven que desde el 26 de septiembre de 2014 nunca más volvió a ser visto
El pasado 14 de junio la Policía Federal Ministerial de la Fiscalía General de la República (FGR) aprehendió a Hernández Cortés en el municipio de Zitlala, Guerrero, con base en una orden de aprehensión librada el 19 de agosto de 2022 por el Juzgado Segundo de Distrito en Procesos Penales Federales de Toluca.
La imputación contra el procesado se basa en el dicho de un testigo protegido con el nombre clave de «Carla», quien asegura que el agente era cómplice de «Guerreros Unidos».
En una diligencia del 14 de enero de 2021, «Carla» identificó a Fidencio en una fotografía marcada con el número 945.
«Reconozco a la persona como policía en Iguala, quien se desempeñaba en la pérgola, cuidaba lo que era el zócalo y el monumento, pasaba información referente a lo que sucedía en esa área», declaró «Carla».
El problema con su dicho es que ubica al policía en Iguala, un lugar donde nunca estuvo adscrito. El otro inconveniente es que este testigo ya ha dado visos de no ser confiable y de haber hecho manifestaciones que van en contra de toda evidencia científica.
Por ejemplo, «Carla» declaró que el normalista Julio César Mondragón fue desollado del rostro por dos agentes de la policía estatal, cuando en realidad los peritajes han concluido que ese desprendimiento de piel en realidad fue ocasionado por la fauna silvestre.
Cuando Hernández Cortés fue detenido, uno de los primeros en defender su inocencia fue Ramón Almonte Borja, el secretario de Seguridad Pública de Guerrero durante el Gobierno del perredista Ángel Aguirre (2011-2014).
Almonte Borja manifestó que Fidencio nunca estuvo asignado en Iguala, como lo afirma el testigo protegido, y que todo el tiempo estuvo comisionado bajo su mando, según reportó el diario El Sur de Guerrero.
Fidencio es parte de los 11 integrantes de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Guerrero contra los que se libraron las capturas en agosto de 2022.
El ex secretario Leonardo Octavio Vázquez Pérez es parte de esa lista.
En esta causa penal, que lo mantiene preso en el Altiplano, el agente no está acusado de la desaparición de los normalistas, sino de la supuesta complicidad con «Guerreros Unidos», el grupo criminal al que se atribuye haber desaparecido a los estudiantes.
