Del Monte enfrentó presiones externas como el reciente arancel del 50% sobre el acero importado.
La compañía Del Monte Foods, reconocida por sus productos enlatados, se acogió a la protección por bancarrota con el propósito de facilitar un proceso de venta supervisado por tribunales y reestructurar su modelo de negocios en medio de un entorno cambiante de consumo.
La empresa, con 139 años de operaciones y sede en Walnut Creek, California, anunció que aseguró un financiamiento por 912.5 millones de dólares para continuar sus operaciones mientras avanza el proceso legal. La decisión fue presentada como una medida estratégica para fortalecer su futuro.
“Después de una evaluación exhaustiva de todas las opciones disponibles, determinamos que un proceso de venta supervisado por el tribunal es la forma más efectiva de acelerar nuestra recuperación y crear un Del Monte Foods más fuerte y duradero”, informó Greg Longstreet, director ejecutivo de la firma, en un comunicado.
La compañía, propiedad de Del Monte Pacific Ltd. con sede en Singapur, también posee marcas como los tomates Contadina, los caldos College Inn y Kitchen Basics, y el té de burbujas Joyba.
Aunque las ventas de Joyba y los caldos mostraron crecimiento en el ejercicio fiscal 2024, la empresa no logró contrarrestar la caída en la demanda de productos enlatados.
Aranceles afectan su desempeño
De acuerdo con análisis financieros, la disminución en la preferencia por alimentos enlatados con conservadores, sumada a los efectos de la inflación, llevó a los consumidores en Estados Unidos a optar por alternativas más saludables o marcas más económicas.
Además de las tendencias de consumo, Del Monte también enfrentó presiones externas. El reciente arancel del 50% sobre el acero importado, implementado en junio por el gobierno del presidente Donald Trump, encareció los costos de producción para la empresa, en particular en lo referente al empaque en latas metálicas.
La situación financiera de la compañía se vio agravada en 2023, cuando un grupo de acreedores impugnó su plan de reestructuración de deuda.
Aunque el litigio se resolvió en mayo pasado, el acuerdo incrementó los gastos anuales por intereses de Del Monte en aproximadamente 4 millones de dólares.