El avión de Pakistan International Airlines (PIA), un Airbus A320 con 98 personas a bordo, estaba a punto de aterrizar cuando se estrelló entre las casas.
Un accidente aéreo en una zona residencial de Karachi, Pakistán, dejó 97 muertos y dos sobrevivientes, informaron este viernes autoridades de ese país.
El avión de Pakistan International Airlines (PIA), un Airbus A320 con 98 personas a bordo, estaba a punto de aterrizar cuando se estrelló entre las casas, provocando una explosión y grandes nubes de humo negro.
El último balance da cuenta de 97 muertos y dos supervivientes e incluye a todos los ocupantes del avión, señalaron los servicios sanitarios de la provincia de Sindh, cuya capital es Karachi. Un hospital local informó de varios muertos en tierra.
Uno de los supervivientes es Zafar Masud, el presidente del Banco del Punyab, uno de los más importantes de Pakistán, dijo el presidente de la aerolínea, Arshad Mahmood Malik.
Las operaciones de rescate terminaron el sábado por la mañana, según las autoridades.
Durante todo el viernes, los servicios de socorro y los habitantes buscaron cuerpos entre los escombros, mientras los bomberos intentaban extinguir las llamas. Un reportero de la AFP vio cuerpos carbonizados que eran trasladados a una ambulancia.
“Había 91 pasajeros y 7 miembros de la tripulación” a bordo del vuelo PK8303, que “perdió contacto con el control aéreo a las 14H37 (09.37 GMT)”, declaró por su parte el portavoz de PIA, Abdulá Hafeez, a medios de comunicación locales.
Según el presidente de la aerolínea, Arshad Malik, el aparato, un Airbus A320 proveniente de Lahore, estaba “cerca de tocar tierra” en el aeropuerto de Karachi cuando se produjo un incidente.
El piloto, Sajjad Gull, quien según un comunicado oficial era el más experimentado al mando de los Airbus A320, se quejó de un problema tras intentar acercarse a la pista por segunda vez, antes de que la torre de control perdiera el contacto con él.
PIA prometió que se efectuará una investigación independiente.
Según el ministro de Interior, Ijaz Ahmad Shah, el piloto había indicado que había “perdido un motor” y que luego hizo una “llamada de socorro”.
“Vi a un pasajero fuera del avión. (…) Estaba vivo. Hablaba. Me pidió que lo salvara, pero sus piernas estaban bloqueadas en la salida de emergencia”, contó Raja Amjad, un testigo que antes vio un cadáver “caer sobre su coche”. Agregó que no oyó “ningún grito” de otros pasajeros mientras el avión ardía.
Los habitantes cerca del lugar del accidente explicaron que los muros temblaron y que luego hubo una gran explosión por el impacto.
“Venía de la mezquita cuando vi un avión que ladeaba. El ruido de los motores era bastante extraño. Volaba tan bajo que las paredes de mi casa estaban temblando”, dijo Hasan, un testigo de 14 años.
Mudasar Ali, un habitante de Karachi, escuchó “una gran explosión”. “Me desperté oyendo a gente llamando a los bomberos”, contó.
El accidente coincide con la preparación en todo el país de la celebración del final del Ramadán y el inicio del Aíd al Fitr, que lleva a muchos paquistaníes a viajar de vuelta a sus casas y pueblos.
El primer ministro paquistaní, Imran Khan, indicó que estaba “conmocionado y triste” por el accidente y escribió en Twitter que está en contacto con el director de la compañía aérea.
Los vuelos comerciales se habían reanudado hace tan solo unos días tras estar paralizados por la pandemia de coronavirus.