Se trata de un edificio de 17 niveles que se construyó presuntamente de manera ilegal sobre el terrero de un vaso regulador de la presa Anzaldo.
Este viernes, personal de la Secretaría de Obras y Servicios de la Ciudad de México inició con la demolición de un edificio bautizado como el “símbolo de la corrupción de la Ciudad de México“, ubicado en el número 3402 de la avenida Periférico Sur, en la alcaldía de Álvaro Obregón.
“Estamos ejecutando la demolición total del inmueble que ordenamos desde el año pasado, a los dueños, al representante legal del fideicomiso que ostenta la propiedad del inmueble”, refirió Andrea Lilian Guigue, directora general de Evaluación de Impacto Ambiental de la Secretaría del Medio Ambiente del Gobierno de la Ciudad de México.
Se trata de un edificio de 17 niveles que se construyó presuntamente de manera ilegal sobre el terrero de un vaso regulador de la presa Anzaldo.
Durante los últimos meses y derivado de diferentes juicios en materia de protección civil, de construcción y de impacto ambiental, el gobierno capitalino había colocado sellos de suspensión de actividades y de clausura.
Pero estos juicios habían sido combatidos por los propietarios y la empresa constructora, con suspensiones y recursos de amparo.
Sin embargo, este jueves, los magistrados del Tribunal de Justicia Administrativa de la Ciudad de México resolvieron un juicio en materia de protección civil, en el que determinaron que esta obra se construyó sin contar con los permisos en materia de impacto ambiental.
“Nos fuimos a un juicio desde que empezamos la administración hasta el día de ayer, que el Tribunal de Justicia Administrativa nos concede la razón al gobierno de la Ciudad de México para poder ejecutar esta demolición”, explicó Andrea Lilian Guigue, directora general de Evaluación de Impacto Ambiental de la Secretaría del Medio Ambiente del Gobierno de la Ciudad de México.
En un mensaje de Twitter, la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, celebró el inicio de la demolición del edificio.
El gobierno capitalino solicitó el apoyo de elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana para proteger las labores de demolición.
La Secretaría del Medio Ambiente del gobierno capitalino informó que la demolición podrá durar varios meses, porque primero quitarán el concreto que hay en cada uno de los pisos y después desmantelarán las estructuras y los pilotes de metal que sostienen el edificio.
