El papa Francisco advirtió el domingo a los italianos de que no bajen la guardia contra el coronavirus ahora que las tasas de infección han disminuido y los instó a obedecer las reglas del gobierno sobre el distanciamiento social y el uso de mascarillas.
Francisco, dirigiéndose a varios cientos de personas en la Plaza de San Pedro para su bendición del domingo, reaccionó a los aplausos que estallaron cuando dijo que su presencia, aunque reducida, era una señal de que Italia había superado la fase aguda de la pandemia.
Tengan cuidado. No canten victoria demasiado pronto”, les advirtió.
Cerca de 34.000 personas han muerto en Italia a causa del coronavirus, la cuarta cifra más alta del mundo después de Estados Unidos, Gran Bretaña y Brasil.
El número de muertes diarias ha disminuido de casi 1.000 hace varios meses a 72 el sábado. Italia entró en la última fase de la flexibilización de las restricciones el 3 de junio, cuando se permitió que la gente viaje de nuevo entre regiones.
Sin embargo, algunos italianos, en particular los jóvenes, han incumplido otras normas de distanciamiento social y de uso de mascarillas en lugares públicos. Las autoridades han advertido del peligro de una segunda oleada.
Todavía tenemos que seguir las reglas”, dijo Francisco.
Gracias a Dios, estamos dejando la peor parte, pero siempre obedeciendo las reglas que las autoridades han estipulado”, dijo.
Francisco dijo que nadie debe olvidar que el coronavirus todavía está cobrando muchas víctimas en otros países.