Las viejas practicas o malas mañas, de algunos tránsitos de Saltillo y el ajustador de siniestros parece que nunca van a desaparecer y cuando se ponen de acuerdo el responsable y hasta el afectado poco pueden hacer.
Como reportero he visto a éticos representantes de aseguradoras, pero también quienes son capaces de corromper a los policías con tal de llevarse una buena lana.
El responsable debe hacerse responsable, no hay vuelta de hoja, pero entre las mañas, insisto, no de todos, se da el aumentar en el lugar el costo de los daños.
El percance puede ser mínimo y si no traes seguro, algo muy común en México, viene el abuso entre estos dos personajes que se conocen bien.
La tarde del domingo en Saltillo, sobre Venustiano Carranza, se registró un accidente por alcance entre un Neón y un Aveo; el conductor del Aveo resultó responsable de los daños que a simple vista resultaban mínimos, incluso que el afectado reconocía no era “nada”.
Al sitio arribó el ajustador Alberto González Martínez, de INBURSA; casi de inmediato llegó un prepotente policía de tránsito que sin identificarse comenzó a hostigar al responsable, amenazando con recoger su vehículo y encerrarlo en las celdas si no liquidaba los daños ahí mismo.
La presión lógicamente fue acordada con el ajustador, el pago que exigían era de 15 mil pesos al momento, cuando los daños no pasaban los los 3 mil.
Esta vieja práctica es un recurso que usan los ajustadores como Alberto y se reparte en unos 3 mil para la reparación, 5 mil para el policía y el resto para el trabajador de INBURSA.
Y es que pocos conductores y asegurados saben que la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), creó un micrositio para evaluar a los ajustadores que hasta el momento tienen una calificación reprobatoria de 4.6. No se les puede sancionar, pero si sabrás a quien contratar.
Son 21 compañías y aunque INBURSA tiene una calificación aceptable en seguros, requiere de buenos ajustadores para seguir compitiendo en un País, donde ellos mismos van traicionado la confianza de la gente.
Los ajustadores no sólo van contra los responsables, en ocasiones si es necesario y acuerdan con otro similar y la policía, su propio cliente sale perdiendo.
Cuando la autoridad recibe dinero como soborno, poco se puede hacer, así es que recuerda que ellos siempre tratarán de intimidarte para cobrarte en el lugar !Chicle y Pegue!
Aquí puede reportar y evaluar la calidad en la atención del servicio que le brinda su ajustador de seguros.
